En Televisa, su nombre provoca por lo menos risas nerviosas y por lo mucho, reflexiones en torno a la sana competencia y el trabajo justo: Jesús Ochoa. Identificado con ese karma de ser un actor de cine, combativo, poco dispuesto a las “chambas por dinero” y un asiduo en los elencos de TV Azteca, Ochoa acepta ahora su primera telenovela en Televisa: El último matriomnio feliz.
El productor del melodrama, Roberto Gómez Fernández, le quita presión al nombre: “Fue fácil convencerlo. Le di el guión, lo leyó y le pareció bueno. Negociamos y firmamos el contrato”.
Rebecca Jones, sonrisa de por medio, dice con un tono de satisfacción: “Yo ya había trabajado con él en algunos proyectos de otras empresas”. Es evidente que este enunciado tiene un significado importante para Ochoa y Jones: es la demostración de que los actores en México se han abierto camino para trabajar en televisoras diferentes y derribar poco a poco los vetos.
La propia Jones regresa a Televisa tras 15 años de una ausencia en la que trabajó lo mismo para Telemundo que para TV Azteca y que en algún momento ella denunció como un “trato maquiavélico”: “A mí no me llaman de Televisa y a mi esposo (Alejandro Camacho) no lo llaman de TV Azteca”. Ahora ha ocurrido: Alejandro Camacho y Rebecca Jones juntos en Televisa para una telenovela en tono de farsa que aborda el tema de los matriomonios de una manera muy cotidiana. Y Jesús Ochoa completa este cuadro con un personaje que, por cierto, fue rechazado por Damián Alcázar quien ya ha explicado sus razones: “Me llamaron para hacer una serie y luego me salieron con que era telenvoela; y a mí las telenovelas...”. Alcázar completa su opinión con un gesto: se mete el dedo en la boca, agacha el cuerpo y saca la lengua.
La inclusión de Jones y Ochoa en un elenco de Televisa pone especialmente feliz a Alejandro Camacho: “Yo he trabajado para televisoras de Estados Unidos, donde compites no con una o con dos, sino contra 2 mil 400 programas. La apertura que Televisa ha tenido desde hace algunos años me parece buena pero, sobre todo, algo muy necesario porque eso fomenta las oportunidades de trabajo para los actores”.
“Cuna de lobos”, la serie
Rebeca Jones no regresó a Televisa sólo para esta telenovela sino también para hacer de Catalina Creel en el refrito de Cuna de lobos ahora adaptado a serie. “Ya leí el primer capítulo y me pareció una maravilla. El título ahora es Herencia de sangre y, aunque se pospuso unos meses, estoy a punto de platicar con el productor Salvador Mejía para afinar algunos detalles”, dijo la actriz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario